Ya mencionamos que algunas escuelas violinísticas tradicionales demoraban el estudio de los cambios de posición hasta no haber impostado la mano sólidamente en la primera. Esto pordría parecer lógico y sin lugar a duda hasta cierto punto lo es. Pero no debemos exagerar la demora para comenzar a enseñar los cambios de posición. Arrisgamos “pintarlos” como demasiado difíciles como si fueran en efecto peligrosos o inaccesibles.
No debemos olvidar que los cambios de posición (como lo mencioné ya en nuestro Libro Nº 3) constituyen uno de los temores o miedos básicos de todo violinísta. Hay que evitar esos miedos afrontándolos…de lo contrario después será muy difícil corregirlos.
Apenas el violín ha comenzado a estar cómoda y firmemente sostenido es aconsejable comenzar a trabajarlos. Incluso cuando la mano izquierda todavía no está perfectamente impostada.
Me refiero a “juegos” a movimientos al principio imprecisos en los que el alumno pueda mover el brazo sin que por ello el violín salga de su posición. Algunos ejemplos de estos ejercicios están el Cuaderno Nº 4: al principio no deben deslizarse los dedos rozando la cuerda sino mover simplemente el brazo para acertar (o no acertar esto no importa mucho al principio) a los armónicos. Por una razón misteriosa los armónicos ejercen una fuerte atracción en los niños.
Aprovechemos esto a nuestro favor.
Los detalles que deben tenerse en cuenta al aplicar los ejercicios preparatorios de Cambios de Posición del Cuaderno Nº4 son:
– El violín debe sostenerse firme y elásticamente.
– El pulgar no se debe apretar y debe apenas rozar el mango a medida que el brazo se mueve.
– Los movimientos no serán ni violentos ni bruscos permitiendo a la mano que describa las curvas naturales que instintivamente realice cada niño: por ahora salvo el pulgar los dedos no se apoyarán en el camino.
La precisión de los movimientos la iremos trabajando poco a poco. Y para evitar confusiones reproducimos un pentagrama de estos pequeños ejercicios para que luego los localicen en el Cuaderno Nº4
Ejemplo musical Nº6
Repetir el ejercicio en las demás cuerdas.